Cuando tu pareja y tú sólo sabéis discutir

por | Dependencia emocional, Problemas de pareja, relación de pareja

Os habrá pasado alguna vez que estando en pareja ha habido momentos en que no hay manera de que os encontréis, y cuando intentáis comunicaros todo son malos rollos.

Y yo te pregunto: ¿dónde te estás enfocando?

¿Te has preguntado por qué siempre ves aquello que no te gusta o que no sabe hacer tu pareja? y por otro lado, ¿crees que sólo pones el foco en las dificultades o en aquello que te disgusta de la relación y en vuestros problemas de pareja?

A veces de manera automática ponemos toda nuestra atención y energía en ver todo lo que no hay en la relación, y olvidamos darle valor a aquello que sí tenemos como pareja y de manera individual estando en relación.

Es muy probable que si estás en esta relación, la persona y la relación te están aportando cosas positivas. 

Aquí no entrarían los casos de maltrato, faltas de respeto y abandono por parte de la pareja. 

En estos casos es muy necesario que veamos todo esto claramente para que podamos salir rápido de la situación y de la relación, ya que cuando ocurre esto no hay que hacerse cuestionamientos, sinó coger las maletas e irse.

En este artículo hablo de los casos en los que hay un amor, hay respeto mutuo, una decisión de caminar juntos, pero que en algunos momentos aparecen dificultades importantes que os alejan y impiden poderos acercar de nuevo, de una manera más o menos fácil.

¿Qué puedo hacer cuando sólo sé comunicarme discutiendo y no sé hacerlo de otra manera?

Te propongo para ello que te hagas algunas preguntas:

  • ¿Qué ha pasado que me siento tan enfadad@, decepcionad@, ( o la emoción que sienta )?
  • ¿Qué necesito de mi pareja o de la relación que no se está dando?
  • ¿Qué necesito hacer o decir y no estoy sabiendo o pudiendo hacer?

Antes de tomar decisiones irreparables o que puedan dañar a la pareja evitando así que la relación se desgaste, cuando hay dificultades importantes de comunicación o acercamiento, es importante que contactemos con nosotros, con lo que nos está sucediendo y podamos tener claridad con lo que pensamos y sentimos.

Darte cuenta de qué piensas, qué sientes, qué te está pasando y qué necesitas te ayudará a que cuando te pongas delante de tu pareja, dejes de acusarle y centrarte en él o ella y pongas la atención en ti.

Cuando estamos en relación es muy importante que podamos centrarnos en qué nos pasa a nosotros y dejar un poquito de lado al otro.

Cuando hacemos esto, y retomamos de nuevo el contacto con el otro, podremos decirle qué nos está pasando, y al no centrar la atención en el otro, el otro puede que no se sienta juzgad@ ni ataca@ y pueda abrirse.

Cuando dejamos de sentirnos juzgados o atacados es mucho más fácil que podamos abrirnos a ver y escuchar qué tiene el otro qué decirnos o comunicarnos. 

Incluso cuando dejamos de lado el juicio y nos abrimos al otro, es cuando podemos tomar de este todo lo que tiene para darnos o aportarnos.

La relación de pareja junto con la de relación con los padres, es la relación de las relaciones, donde aparece mayor complicación. 

En ella suelen abrirse muchos conflictos que llevamos dentro nuestro y que gracias al contacto íntimo con el otro, pueden salir a la luz.

Y es cuando empiezan las incomodidades, manipulaciones o los juegos psicológicos que lo que intentan es evitar este contacto que tenemos con nuestra dificultad, dolor o heridas profundas que tanto deseo tienen de salir para encontrar solución.

Si no tomamos las riendas de nuestras relaciones, dificultades o dolores internos, es probable que podamos tener relaciones de dependencia emocional y estas relaciones provocan mucho sufrimiento.

Quién no ha sentido o visto alguna vez que la relación que tiene con su pareja se parece mucho a su padre o madre.

Como nuestros padres han sido nuestros referentes y de los que hemos aprendido qué es ser una mujer (con el ejemplo de mamá) y qué es ser hombre, (con el ejemplo de papá), muchas veces repetimos lo que hemos aprendido y visto en casa teniendo parejas que se asemejan a nuestros progenitores.

Cuando hemos podido hacer un trabajo interno con nosotros, en terapia individual respondiéndonos a todas las preguntas anteriormente mencionadas, es interesante, también, poder ver qué es aquello que sí nos gusta, atrae, y resalta de nuestra pareja.

Y aquí poner toda la atención en aquello que funciona, en aquello que la pareja resalta en nosotros y en lo que sí nos llena la relación y destacamos que nos hace felices. 

Con todo ello, ya estamos preparados para ir a nuestra pareja, quizás te ayudará hacerlo en terapia de pareja, y mantener la conversación que tanto os cuesta tener, ya que iremos con todo un trabajo previo de introspección.

Sabiendo qué te sucede y os sucede, habiendo puesto la atención en ti y sabiendo qué necesitas para sentiros mejor y hacer sentir mejor la relación de pareja.

Te animo a que inviertas en ti para que tu relación de pareja salga cada vez menos perjudicada y podáis comunicarnos con más amor, paciencia, cariño y poder expresaros desde vuestra verdad, vulnerabilidad y honestidad. 

Puede parecerte difícil pero esto es muy real, si tienes dificultades para ello te animo a que busques ayuda y empieces un proceso terapéutico, acudiendo a terapia individual de manera presencial en Sant Pol de Mar o online.  

Tú y tus relaciones de pareja cambiarán por completo. Te doy mi palabra.

Laura Folch Solé

Te ayudo a mejorar la relación que tienes contigo y con los demás, para construir felicidad en tu vida.

Artículos relacionados

Resumen de privacidad

Esta web utiliza cookies para que podamos ofrecerte la mejor experiencia de usuario posible. La información de las cookies se almacena en tu navegador y realiza funciones tales como reconocerte cuando vuelves a nuestra web o ayudar a nuestro equipo a comprender qué secciones de la web encuentras más interesantes y útiles.

Información sobre política de cookies.